Cómo crear un impulso en su ministerio

Cómo crear un impulso en su ministerio




Recuerde que las dos primeras leyes del movimiento de Newton? He aquí un repaso ...

Primera ley: Todo objeto continúa en su estado de reposo o de movimiento uniforme en línea recta a menos que obligado a cambiar ese estado por fuerzas externas actuado sobre ella.

Segunda ley: La aceleración (a) de un cuerpo es paralelo y directamente proporcional a la fuerza neta (F) que actúa sobre el cuerpo, es en la dirección de la fuerza neta, y es inversamente proporcional a la masa (m) del cuerpo .

En otras palabras, las cosas que están sentados aún no se mueven a menos que algo les empuja, tira de ellos, o de otra manera les obliga por la fuerza ... incluyendo iglesias.

Me doy cuenta de este post lo más probable es que me entrar en un poco de problemas, pero yo voy a exponer lo que creo que es de acuerdo con la manera en que Dios ha diseñado las cosas funcionen. Iglesias a menudo no ven mucho movimiento, ya que no se ve mucho movimiento. Las iglesias que no están dispuestos a adaptarse a morir. Esto es simplemente la ley del universo en el que vivimos.

Si eso suena radical, considere que el mismo Dios tiende a moverse y hablar de diferentes maneras, en diferentes épocas, a través de diferentes medios.

Él se ha revelado progresivamente mismo a través de varias dispensaciones y continuará haciéndolo hasta que, literalmente, todo cambia cuando Él hace todas las cosas completamente nuevas. Incluso en la era del Nuevo Testamento en el que vivimos, Dios ha usado varias iglesias y líderes muy poderosamente a dar forma a la dirección de la cultura, sino que tiende a usarlos sólo para una temporada.

En su excelente libro, La Iglesia con Propósito, Rick Warren habla sobre el surf las ondas espirituales. Señala que no depende de nosotros para hacer las olas, sino más bien a montar bien.

Así que si su iglesia no está en movimiento, cada vez más, viendo historias frescas de cambio de vida, conocer a nuevas personas perdidas, entrando en nuevos territorios misionales, o levantar nuevos líderes, entonces algo debe ejercer una fuerza sobre su iglesia para que se mueva otra vez.

O como el propio Newton podría decirlo, algo que tiene que suceder para crear un nuevo impulso.

Uno de los argumentos clásicos que he escuchado de los líderes de la iglesia en el pasado es "cambiar por el simple hecho del cambio no es bueno."

No estoy de acuerdo. A veces, el cambio es bueno para mí, incluso cuando no tiene ningún propósito en particular que no sea para mí desechar de mi rutina actual. De hecho, esta es una palabra de confesión personal: Cuando se le preguntó cuáles son mis mayores fracasos de liderazgo en el pasado, casi siempre apuntan a momentos clave en que elegí para estar a salvo y mantener a todos felices en lugar de empujar hacia adelante en la dirección que yo pensé mejor . Si pudiera hacerlo de nuevo, me arriesgo a la aprobación de los demás a cambio de un movimiento de Dios todos los días!

No sé lo que su iglesia tiene que cambiar, en particular, aunque yo estaría más que feliz de entrenar con el proceso de planificación y descubrimiento, pero podría ser algo como ...

• Vuelva a nombrar y volver a constituir

• Moverse, incluso a un edificio adecuado

• Cambiar el enfoque de la música y los medios de comunicación

• Matar a un ministerio clave que está medio muerto ya

• Inicio de un nuevo ministerio o servicio

• Regalar recursos suficientes para causar un poco de dolor

• Diversificación en una iglesia o un nuevo campus

• La contratación de un nuevo empleado

• Re-estructuración del personal y la forma en que la iglesia hace el ministerio

• Renovación de un edificio con fecha

Sólo recuerde que tratar de mejorar las cosas simplemente como están siempre en orden, pero rara vez recibe una iglesia inmóvil en movimiento de nuevo. Dios usa a cambio de infundir nueva vida a las cosas inanimadas, muertos, entre ellos iglesias.

No vaya a destruir su iglesia, daño a la gente en el camino, y la culpa es de este blog. Espero que tengas un pastor lo suficientemente responsables como para dirigir bien a la gente. Pero si su iglesia ha dejado de moverse, que sólo puede ser hasta usted para averiguar lo que se moverá de nuevo.